Casquero 02.09.2019 | 11:20 | Medio: La Provincia
La hipérbole es un recurso dentro del colectivo nacional desde mucho antes de que los poetas sacaran su máximo provecho. A los españoles nos gusta exagerar lo que hacemos, cómo lo hacemos y por qué lo hacemos. Nos gusta vendernos bien, ser los primeros en todo y, sobre todo, ser diferentes. Los deportes electrónicos no están exentos.
Por ello, en su día, de muchas voces vino el apodo de «la Corea del Sur europea», en referencia a la máxima potencia en cuanto a cultura y trasfondo histórico en el sector del videojuego competitivo. Sin embargo, al respecto uno comete el error más básico: la simplificación. Entender la industria y los deportes electrónicos en España como una sola entidad es equívoco de base.
Los eSports están distendidos por todo el territorio español y tienen un reconocimiento dispar en según qué zonas. A día de hoy, las Islas Canarias representan un avance en materia política con un debate que no parece tener fin, pero que mete al fenómeno en el juego político por primera vez en territorio nacional. En otros países, como Alemania o Francia, este factor ha llegado al discurso estatal de una u otra manera.
Pero sin duda, no hay una centralización exclusiva en el plano económico y deportivo. Barcelona aloja a bastantes empresas ya reconocidas como Liga de Videojuegos Profesional (LVP), aupada por Mediapro, pero también están presentes varios equipos profesionales y la ciudad condal celebra cada año Barcelona Games World.
Madrid, la capital, tiene Gamergy en Ifema como su feria más reconocida, pero sin duda destaca por la infraestructura que MAD Lions y Movistar Riders poseen en la ciudad del Manzanares. ESL, principal competidora de LVP en materia de retransmisión de contenidos, también tiene su sede española en la Comunidad Autónoma madrileña.
El resto de España tiene también industria, pero de forma puntual. Dreamhack lleva ya muchos años en la capital del Túria, Valencia, y el pasado diciembre celebró su primera edición en Sevilla. Fun&Serious es un festival anual celebrado en Bilbao que este año ganó mucha popularidad en el nicho de los deportes electrónicos por la organización de un torneo benéfico que recaudó 90.000 euros para el SJD Pediatric Center de Barcelona. Tenerife acogió la fase final del mundial de Clash Royale el pasado verano, así como múltiples eventos de League of Legends